Navegamos mientras permancemos atentos
a la radio, se escuha alguna llamada en busca de ayuda
y nos llaman para contarnos que un velero
se ha quedado varado, justo donde habíamos
pasado la noche.

Perdemos la colada durante la travesía
pero no nos importa,
nosotros vamos cantando
«Sunday morning birds» de Pajaro Sunrise

Nos parece una canción como
que muy adecuada 😉

Llegamos a Es Pujols,
aún hace viento,
 y el mar no está en calma,
pero decidimos bajar, aún sabiendo 
que tomaremos tierra absolutamente calados.

El tema dinghy casi merece post aparte
entre las olas, el meneito, y bla bla bla
siempre llegamos mojados a tierra.


(foto de nuestro dinghy)

Pedimos consejo para comer 
y nos recomiendan

Comemos de maravilla 
por 25,.€ por persona
la Fideúa esta bueniiisima.

Poco a poco va despejando el día
y a la vuelta en Puerto Savina
decidimos hidratarnos con unos estupendos
zumos en nuestro hostal favorito

Hostal La Savina
pincha Aquí si quieres saber más
sobre el Hostal La Savina.

 Volvemos cantando al barco
porque ya esta muy despejado
y bueno porque el vino blanco
de la comida también hace su efecto.

Poco a poco vamos mutando a sirenas
porque queremos quedarnos a vivir aquí.

Salimos a cenar a Chezz Gerdi
el italiano con más encanto 
de Es Pujols.

Se apaga el telón.

…sis and the city…